
Ácaros del polvo
Los ácaros del polvo son conocidos por causar problemas a personas de todo el mundo, ya que pueden provocar alergias y asma. Suelen prosperar en zonas húmedas, pero pueden encontrarse en todos los climas. Las alergias a los ácaros del polvo están causadas realmente por un subproducto de los ácaros: sus heces y cuerpos en descomposición. Estas proteínas presentes en los restos de los ácaros son las principales responsables de las reacciones alérgicas. Los ácaros del polvo son microscópicos, sólo miden entre 0,2 y 0,3 milímetros y no se pueden ver con los propios ojos. Como puede comprender, sus heces son aún más pequeñas y se inhalan en lo más profundo de nuestros pulmones. Como son tan pequeños, se esparcen por el aire cuando la gente limpia o realiza otras acciones que aumentan el flujo de aire en el interior.
Afortunadamente, los purificadores de LightAir reducen y eliminan los ácaros del aire con nuestra exclusiva tecnología patentada para que pueda respirar mejor.


¿Quieres inhalar excrementos?
¡No gracias!
Cuando los ácaros del polvo y su producto secundario de heces y cuerpos en descomposición permanecen en el aire, permanecerán en el aire durante horas debido a su pequeño tamaño. Nuestros purificadores de aire reducirán eficazmente los ácaros del aire para que pueda respirar mejor y mantenerse sano.






Así es como se sienten los ácaros del polvo.
Síntomas típicos de la alergia a los ácaros del polvo; puede experimentar todos o sólo algunos de ellos:
- Fiebre del heno
- Estornudos
- Asma, dificultad para respirar
- Eczema infantil
- Picor, enrojecimiento o lagrimeo de los ojos
- Congestión nasal
- Picor de nariz
- Goteo postnasal
- Tos
- Presión y dolor facial
- Despertares frecuentes


¿Cómo puedo controlar
los ácaros del polvo?
- Mantenga la casa seca y sin humedad, especialmente en el dormitorio.
- La aspiración en seco no recoge los ácaros del polvo. Considere la posibilidad de limpiar las alfombras con vapor cuando sea posible.
- Lave la ropa de cama, incluidas las fundas de almohada y las fundas de colchón, en agua caliente [ 130 °F (54,5 °C)] cada semana.
- Utilice fundas a prueba de alérgenos en su colchón, somier y almohadas, y lávelos regularmente.
- Invierta en un purificador de aire para mantener los ácaros fuera del aire.